Así explicó AMLO por qué está en contra de sus antecesores

En la conferencia mañanera, el mandatario dijo que no odia a sus antecesores y que sus diferencias con Carlos Salinas de Gortari, Ernesto Zedillo Ponce de León, Vicente Fox Quesada, Felipe Calderón Hinojosa y Enrique Peña Nieto no son personales.

proceso.com.mx

CIUDAD DE MÉXICO (apro).- El presidente Andrés Manuel López Obrador sostuvo que los exmandatarios, Carlos Salinas de Gortari, Ernesto Zedillo Ponce de León, Vicente Fox Quesada, Felipe Calderón Hinojosa y Enrique Peña Nieto, no son sus enemigos sino adversarios con los que difiere por la política neoliberal que impusieron para privilegiar a una minoría, auspiciar la corrupción, empobrece al pueblo y desatar una guerra contra el narcotráfico.

“Ellos actuaron en su momento, aplicaron una política que yo combatí siempre, nunca estuve de acuerdo con la política de Salinas, ni de Zedillo, ni de Fox, ni de Calderón, ni de Peña Nieto, entonces, las diferencias son de orden político, no en lo personal”, indicó.

En la conferencia mañanera, el mandatario dijo que no odia a sus adversarios y consideró que la política impulsada por sus antecesores benefició a minorías, auspició la corrupción, produjo el atraso de México y el empobrecimiento del pueblo, “ese es el fondo del asunto”.

Salinas

Definió al expresidente Carlos Salinas (1988-1994), como “el padre de la desigualdad moderna” porque entregó los bienes de la nación, como empresas, bancos, minas y las tierras ejidales a particulares para construir una nueva oligarquía en México.

“Cuando entró Salinas había una sola familia mexicana con más de mil millones de dólares de capital, cuando terminó Salinas ya eran 24 multimillonarios mexicanos con más de 48 mil millones de dólares y la mayoría de ellos se había beneficiado o con un banco o con una empresa pública”, refirió.

Zedillo

Del expresidente Ernesto Zedillo (1994-2000), señaló que sus diferencias radican en el hecho de que, ante la crisis económica generada por Carlos Salinas, decidió rescatar a empresarios y convirtió en deuda pública las deudas de particulares y de ahí surge el episodio “llamado Fobaproa”.

“En vez de rescatar a los de abajo, rescatar a los pequeños comerciantes, pequeños empresarios, se rescató a los de mero arriba y se dejó esa deuda que en términos generales significa tres billones de pesos, que la vamos a tener que seguir pagando todavía en nuestra generación y es posible que se herede a las nuevas generaciones. Esa es mi diferencia”, dijo el presidente Obrador.

Fox

Sobre el primer expresidente panista Vicent Fox Quesada (2000-2006), señaló que engañó a millones de mexicanos al decir que representaba un cambio, pero mantuvo la misma política salinista, junto a sus aliados del PRI y participó en el fraude electoral de 2006 para beneficiar a Felipe Calderón.

Como ejemplo, dijo que su secretario de Hacienda, Francisco Gil Díaz fue subsecretario de Hacienda con Carlos Salinas y no hubo ningún cambio porque las privatizaciones continuaron en el foxismo.

“Y para colmo, después de que se logra hacer a un lado al PRI, décadas de lucha de mucha gente de todas las corrientes del pensamiento, porque era una lucha que venía de opositores de derecha, de opositores de izquierda, para hacer a un lado al partido único, al partido de Estado, él traiciona ese movimiento y al final, en vez de respetar la voluntad del pueblo, participa, encabeza el operativo de fraude cuando nos roban la Presidencia de la República en 2006”, dijo

Abundó:

“Pero además él lo confiesa, hay testimonios, declaraciones de él, en donde dice: ‘Claro que participé. ¡Cómo iba yo a dejar que un loco llegara a la Presidencia! Claro que cargué los dados’, a su estilo”.

El tabasqueño exhibió luego en pantalla un mensaje de Fox donde criticó la obra del Tren Maya en los siguientes términos: “Esto es lo que pasa por hacer las cosas con las patas. Marranadas, puras marranadas. Tren Maya, juez federal ordena suspensión definitiva de obras en tramo”.

Al respecto, el presidente dijo:

“¿Ustedes creen que yo tengo odio hacia Fox? No, para nada. Le debe de dar pena a la gente que votó por él, porque mucha gente pensó que iba a haber un cambio y siguió con lo mismo, y con el agravante de que dirige un fraude electoral. Luego de que él llega a la Presidencia por un movimiento democrático opositor, se convierte en un traidor a la democracia”, señaló.

Calderón

López Obrador arremetió después contra Felipe Calderón (2006-2012), al decir que es un inmoral porque asumió la Presidencia de la República sin haber ganado la elección, además de que declaró la guerra al narcotráfico de manera irresponsable, sin tener un diagnóstico, sin saber lo que estaba sucediendo y sin pensar que la paz es fruto de la justicia.

“Él sabe que no gana, no permite que se cuenten los votos, el voto por voto, casilla por casilla; hace acuerdos con todos, hasta con gente impresentable. Es el ‘haiga sido, como haiga sido’. Además, nos induce a esta confrontación con tanto sacrificio, con tantos muertos”, recordó el mandatario.

Destacó el hecho de que Felipe Calderón posteriormente ayudó a Enrique Peña Nieto a conseguir la Presidencia de la república de 2012 a 2018, argumentando que se entendían perfectamente porque ya había un acuerdo, incluso, le deja hasta comprado el avión presidencial.

“Y aparece, se va descubriendo, de que todo esto de la guerra contra el narcotráfico, pues era una pantalla, era una simulación, porque tenían acuerdo con uno de los grupos, algo que era muy común, de proteger a un grupo y combatir a los demás, cuando una autoridad tiene que actuar con rectitud, pintar la raya, definir con claridad las fronteras, aquí está la delincuencia, aquí está la autoridad. No voy a proteger a unos para combatir a otros, no. El que comete un delito tiene que ser castigado, cero impunidad y nada de componendas, sentenció.

Por ello, destacó el caso del ex secretario de Seguridad Pública de Felipe Calderón, Genaro García Luna, quien actualmente está preso en Estados Unidos acusado de narcotráfico y enriquecimiento ilícito.

“Entonces, ahora con lo de García Luna, Felipe Calderón se ha quedado callado, y no sólo él, sino los que lo apoyaron y trabajaron con él y le ayudaron. Me llama la atención que, cuando sale el tema de García Luna, Ciro Gómez Leyva y otros se enojan. ¿Dónde está la capacidad para rectificar? ¿Por qué la autocomplacencia?”, cuestionó el mandatario.

También, explicó que sus diferencias con el expresidente Felipe Calderón se deben a que desató una guerra y autorizó que se llevaran a cabo masacres, cómo se demuestra con los altos índices de letalidad en enfrentamientos.

Peña

Cuando se refirió al expresidente Enrique Peña Nieto, se limitó a decir que está en contra de la corrupción y “desparpajo” que imperó en la pasada administración.

“Pero de ahí a que yo les tenga odio, no, no, no. Si me encontrara yo a Calderón, me encontrara yo a Salinas, a lo mejor lo saludaría. A lo mejor no lo haría por cuestiones políticas, porque me afectaría políticamente, pero lo personal es otra cosa”, concluyó.

Share
Bitnami