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La super contagiosa variante ómicron se está extendiendo por Estados Unidos, provocando un dramático aumento de casos y saturando muchos sistemas hospitalarios. Además de instar a los estadounidenses a vacunarse y recibir el refuerzo, funcionarios de salud pública recomiendan que las personas cambien sus tapabocas de tela por tapabocas médicos de mayor calidad.
¿Qué significa exactamente esta sugerencia?
En una audiencia reciente del Comité de Salud, Educación, Trabajo y Pensiones del Senado, altos funcionarios de salud pública lucieron diferentes tipos de tapabocas. La doctora Rochelle Walensky, directora de los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC), tenía un tapabocas quirúrgico debajo de un tapabocas de tela, mientras que el doctor Anthony Fauci, asesor médico jefe del presidente, usaba un respirador N95.
Algunos gobiernos locales y organizaciones tienen sus propias normas. El Condado Los Angeles, por ejemplo, requerirá a partir del 17 de enero que los empleadores proporcionen tapabocas N95 o KN95 a los empleados.
A fines de diciembre, la Clínica Mayo comenzó a exigir que todos los visitantes y pacientes usaran tapabocas quirúrgicos en lugar de las versiones de tela. La Universidad de Arizona prohibió los tapabocas de tela y pidió a todos en el campus que usen cubrebocas de mayor calidad.
Las preguntas sobre la protección que brindan los tapabocas contra covid, ya sean de tela, quirúrgicas o de grado médico de alta gama, han sido tema de debate y discusión desde los primeros días de la pandemia.
Pero, a medida que cambia la ciencia, también cambian los puntos de vista.
Los CDC no han actualizado su guía de tapabocas desde octubre de 2021, antes de que surgiera ómicron. Esa guía no recomienda el uso de un respirador N95, sólo establece que los tapabocas deben tener al menos dos capas, ajustarse bien y contener un alambre que ajuste en la nariz. Los informes de prensa indican que la agencia pronto podría recomendar el uso regular de un respirador N95 o KN95.
Múltiples expertos agradecerían el cambio, diciendo que éste es el momento adecuado. Pero no desestiman los tapabocas de tela, porque dicen que usar un tapabocas de tela es mejor que no usar ninguna.
“Por lo que sabemos sobre cómo se transmite covid y sobre ómicron, usar un tapabocas de mayor calidad es realmente fundamental para detener la propagación de esta variante”, dijo la doctora Megan Ranney, decana académica de la Escuela de Salud Pública de la Universidad Brown.
Un estudio a gran escala en el mundo real realizado en Bangladesh y publicado en septiembre de 2021 mostró que los tapabocas quirúrgicos son más efectivos para prevenir la transmisión de COVID-19 que los tapabocas de tela.
Por lo tanto, una estrategia fácil para mejorar la protección es colocar un tapabocas quirúrgico debajo de la tela, lo que brinda una mejor capa de protección. Los tapabocas quirúrgicos se pueden comprar en internet a un precio relativamente bajo y se pueden reutilizar durante aproximadamente una semana.
Ranney dijo que aconseja a las personas que optan por usar capas que se pongan el tapabocas de mejor calidad, como la quirúrgica, más cerca de la cara, y la de menor calidad en el exterior.
Si hay que reciclar, el doctor Stephen Luby, profesor de enfermedades infecciosas en la Universidad de Stanford y uno de los autores del estudio de tapabocas de Bangladesh, dijo que también se puede lavar sus tapabocas quirúrgicos y reutilizarlos.
“Durante el estudio, les dijimos a los participantes que podían lavar los tapabocas quirúrgicos con detergente para ropa y agua, y reutilizarlas”, dijo Luby. “Pierdes algo del efecto de la carga electrostática, pero aún así superaron a los tapabocas de tela”. (Parte de la forma en que los tapabocas quirúrgicos filtran eficazmente las partículas es a través de la carga electrostática en el tapabocas).
Pero expertos sostienen que usar un tapabocas KN95 o una N95 es la mejor protección contra ómicron, ya que estos tapabocas son muy efectivos para filtrar partículas virales.
El “95″ en los nombres se refiere a la eficacia de filtración del 95% de los tapabocas contra partículas de cierto tamaño. Los tapabocas N95 están regulados por el Instituto Nacional de Seguridad y Salud Ocupacional, mientras que las KN95 están reguladas por el gobierno chino y las KN94 por el gobierno de Corea del Sur.
Al comienzo de la pandemia, se instó a los estadounidenses a no comprar tapabocas quirúrgicos o N95, para garantizar que hubiera un suministro suficiente para los trabajadores de salud. Pero ahora hay suficientes para todos.
Por lo tanto, si la persona tiene los recursos para actualizar a un tapabocas N95, KN95 o KN94, definitivamente debe hacerlo, dijo la doctora Leana Wen, profesora de política y gestión de la salud en la Universidad George Washington. Si bien estos modelos son más caros y pueden ser más incómodos, la inversión vale la pena por la seguridad que brindan, explicó.
“Es un virus mucho más contagioso, por lo que hay un margen de error mucho menor con respecto a las actividades que antes podías hacer sin infectarte”, dijo Wen. “Tenemos que aumentar nuestra protección en todos los sentidos, porque ahora, por ómicron, todo es más riesgoso”.
Wen también dijo que aunque estos tapabocas se caracterizan por ser de un solo uso, a menos que se encuentre en un entorno de atención médica, las KN95 y las N95 se pueden usar más de una vez. Ella misma utiliza su KN95 durante más de una semana.
Otra cosa importante a tener en cuenta es que hay muchas falsificaciones de tapabocas N95 y KN95 que se venden en línea, por lo que los consumidores deben tener cuidado al pedirlas y asegurarse de obtenerlas solo de un proveedor legítimo.
Los CDC mantienen una lista de respiradores N95 aprobados por NIOSH. Wirecutter y The Strategist han publicado guías para comprar tapabocas KN95 y KN94 aprobadas. Ranney también recomienda consultar el sitio web, Project N95, o el canal de YouTube “Mask Nerd” del ingeniero Aaron Collins.
Pero, si incluso actualización los tapabocas, todavía se está preocupado por ómicron, lo primero que se puede hacer es vacunarse y recibir el refuerzo (booster), dijo el doctor Neal Chaisson, profesor asistente de medicina en la Clínica Cleveland.
“Se ha hablado mucho de que las personas que han sido vacunadas se infectan con ómicron”, dijo Chaisson. “Pero he estado trabajando en terapia intensiva y probablemente el 95% de los pacientes que estamos atendiendo en este momento no siguieron el consejo de vacunarse”.
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