En un hecho inédito, fue gracias a la lecha materna de Christina que se descubrió que había sido asesinada
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En 2014, Christina Ann Thompson murió a causa de una supuesta sobredosis por heroína, sin embargo, la justicia le llegó siete años después luego de que se confirmara que su fallecimiento no fue accidental sino que su propio esposo la envenenó a la hora de cenar.
Este miércoles 16 de noviembre, un jurado encontró culpable a Jason Thomas Harris de homicidio premeditado en primer grado y otros cargos como suministrar una sustancia controlada. De acuerdo con medios locales, los investigadores del caso lograron confirmar que el hombre puso una letal dosis de heroína en el cereal de la mujer.
Por la muerte de su esposa, Jason recibió un seguro de vida por más de 120 mil dólares; después de ella, el hombre que entonces tenía 40 años se mudó a la casa de su familia y sus seres queridos relataron que constantemente se mensajeaba con otras mujeres, señala el NY Post.