Mujer acumula cinco cirugías en 15 años y no logra recuperarse; el IMSS ya “perdió” su expediente

proceso.com.mx

CIUDAD DE MÉXICO (apro).– El 29 de mayo de 2003, a Rosa María Reyes Álvarez le detectaron una fístula rectovaginal y, tras cinco cirugías, no ha podido recuperarse.

Tiene 64 años, de los cuales lleva casi 15 años batallando con la fístula y con los médicos que la operaron en el Hospital General Regional 72 del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), ubicado en Tlalnepantla, Estado de México.

La intervino “la cirujana Carla Jiménez, cédula 9617701; sólo se presentó a operarme y nunca para saber mi proceso de recuperación postoperatorio”, contó Reyes Álvarez a Apro.

Al término de su incapacidad, comenzó a trabajar como camarista en un hotel, pero su salud se deterioró. Comenzó con dolores vaginales y los doctores particulares le recetaban óvulos o cremas.

Acudió a la Clínica 58 del IMSS con su médico familiar, quien le mandó hacer estudios y, pese a que no encontró la fístula, la operó el 23 de octubre de 2005 con el diagnóstico de fístula de colon vaginal.

“Estuve otros 28 días de incapacidad. Si descansaba no tenía problema, pero si empezaba a laborar recomenzaba el problema. Volví a acudir con el doctor, quien me dijo: ‘se le volvió a abrir, cómpreme una Kola-Loka porque voy a tratar de pegarla, por medio de un espejo vaginal”, relató.

El doctor la volvió a operar el 17 de enero de 2006 y la incapacitó por 30 días; tiempo después el problema regresó. En octubre de ese año fue enviada al Hospital General Centro Médico Nacional La Raza.

La enviaron con el doctor Rodríguez, en Proctología, y la revisaron hasta que le practicaron una endoscopía y le encontraron dos puntos rojos, “como piquetes”, y se le diagnosticó con una fístula rectovaginal alta recidivante, pero le dieron 40 días de incapacidad porque ya había sido operada en cuatro ocasiones.

En una carta fechada el 3 de octubre de 2017 y dirigida al entonces secretario general del IMSS, Mikel Arreola, Rosa María cuenta su historia y agrega que la despidieron de su trabajo porque no podría trabajar en esas condiciones, ya que debe cargar con bolsas de colostomía y necesita medicamentos.

Le relató que en el IMSS le han argumentado que no la pueden atender porque su expediente fue extraviado.

“No tengo trabajo. No alcancé pensión porque dos veces retiré ayuda por desempleo”, dice.

Hasta 2017 ya la habían operado en cinco ocasiones. La más reciente fue en febrero, y no queda bien.

Share
Bitnami