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El 2020 llegó y los municipios no han publicado aún sus reglamentos referentes a la restricción de plásticos, es decir, para el uso y venta de bolsas de plástico y popotes, por lo que la Cámara Regional de la Industria de la Transformación (Careintra) con sede en Jalisco insistió a los dueños de comercios que venden productos de plástico o que ofrecen a sus clientes bolsas, para que no se dejen sorprender porque aún no deben de aplicarse multas.
En entrevista para Heraldo Radio Jalisco, Juan Porras Brambila, presidente de Careintra en Jalisco, añadió que aún hace falta conocer el organismo que vigilará el cumplimiento de este mandato federal, mismo que deberá armonizarse con las leyes locales y que hasta ahora no se ha realizado este paso.
“Todavía no está habilitada la parte de multas o sanciones para quien utilice bolsas o popotes porque el trabajo todavía no está concluido de parte de las diferentes autoridades que tienen que intervenir en este proceso como para llegar a eso porque históricamente hemos tenido el dato de que cuando una legislación nueva entra en vigor o que los plazos comienzan a llegarse, muchas veces se hacen presentes falsas autoridades en los comercios o en las industrias para ejercer algún tipo de extorsión o amenaza”.
Comentó que es necesario también ‘educar’ a los consumidores, y que más allá de la información que se viralice en redes sociales en donde se sataniza a los plásticos, se deben difundir más estudios científicos en donde se hable del tiempo de degradación de los productos, pero sobre todo que se impulse el rehuso de materiales.
“Este tema está muy satanizado en redes sociales sobre todo y nos hemos topado con documentales en plataformas de streaming donde se dicen varias mentiras y son mentiras que llegan no solo a Jalisco o a México, sino a nivel mundial y es una situación muy desafortunada porque cuando vamos a los análisis del ciclo de vida y del impacto de la huella de carbono que tienen los plásticos frente a otros materiales, realmente el material más ecológico es el plástico, pero lo que no hemos podido lograr es hacer un manejo adecuado de los residuos de estos materiales para poderlos reaprovechar y reutilizar adecuadamente”.
Los empresarios, dijo, están preocupados por sus negocios porque también dan sustento a un número importante de familias y más allá de solo verse afectados los fabricantes, también los pequeños negocios de venta de plásticos podrían colapsar si antes no se ponen reglas claras que permitan venta de ciertos materiales en estos lugares, pero tampoco se ha dado voz a su expertiz para colaborar en dichos reglamentos.
Denuncian comerciantes acoso y presumen actos de extorsión
Vestida con uniforme del Ayuntamiento de Guadalajara, una mujer llegó a un negocio de venta de bolsas que se ubica en la zona del Parían en el centro tapatío, en las inmediaciones de Calzada Independencia y Juárez, le pidió que mostrara su permiso para vender plásticos y le comentó los montos de la multa a la que se haría acreedora si no tramitaba su permiso. La vendedora, comparte que se siente angustiada ante tal acto y al mencionarle el monto de la multa, presume que pueda ser para pedirle de forma velada un ‘moche’ para no multarla.
“Llegó a checarme y me dijo que sí tenía mi permiso vigente para seguir vendiendo bolsas porque podía contaminar. Yo le dije que desconocía eso y que le iba a preguntar a la persona que le vende la mercancía. Me dijo que me informara muy bien porque la multa va de ocho a 15 mil pesos”.
La comerciante, cuyo nombre pidió ser omitido en esta nota, añadió que el permiso que le solicitaban era el certificado de biodegradable, pero se muestra preocupada por actos de intimidación además de que bajarán sus ventas. “A ver hasta dónde aguantamos…”, lamenta.
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