Profesores consideran inviable conservar ejemplares varios años

Maestros frente a grupo de educación primaria consideraron que el rediseño del libro de texto de geografía para alumnos de sexto de primaria, el cual será de carácter multianual y con aplicaciones digitales, es una propuesta que difícilmente podrá prosperar en las escuelas.

Explicaron que los alumnos no sólo leen los libros, sino que además escriben en ellos, los rayan y los recortan como parte de su experiencia de apropiación, lo que hace muy difícil que se conserven intactos para otro alumno. Es una propuesta que ya se intentó en secundaria, con malos resultados, porque si te dan 30 libros este ciclo escolar, y se pierden cinco, o al cabo de tres años sólo te quedan 10, ¿quien se hará responsables de los que ya no están en la escuela?

Lo anterior, después de que el secretario de Educación Pública, Esteban Moctezuma Barragán, anunció que en el ciclo escolar 2019-2020 habrá un nuevo libro de geografía para sexto grado de primaria, el primero en su generación, el cual deberá entregarse al concluir el ciclo escolar, en una práctica que se debe prolongar por un mínimo de tres años con el fin de ahorrar recursos y crear una conciencia cívica, pues incluso, anunció el funcionario, será parte de la calificación del alumno en la materia de civismo, la manera en que entreguen el libro.

Los docentes señalaron que hay otras propuestas que consideran la realidad que enfrentan las escuelas, pues en muchos casos, los únicos materiales educativos y culturales que llegan a las casas de los alumnos son los libros de texto gratuitos, por eso son tan importantes. Y en vez de pensar en regresarlos a la escuela, deberíamos incentivar que sean libros de consulta no sólo para los alumnos, sino para sus familias y que sean el acervo cultural en casa, pues indicaron que tampoco basta que se le incluya un cuaderno de trabajo con el que sí podrán quedarse los alumnos.

No obstante, Moctezuma Barragán detalló en su presentación que el libro de geografía es el primero de muchos más, pues lo que pensamos es que en cada ciclo escolar se vayan suplantando los libros que tienen un uso, sólo un ciclo escolar, porque estos libros son mucho más duraderos. Tienen un costo de alrededor de dos veces y medio más, pero una duración de alrededor de cinco veces más que los libros regulares de texto, enfatizó.