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La propagación del coronavirus de Wuhan volvió a encender alertas entre especialistas, no sólo por el número de muertos que el patógeno ya ha causado-170 en China-sino por el descubrimiento de que el virus puede propagarse de persona a persona aún sin que el paciente presente síntomas de la enfermedad.
Según lo reportado el 24 de enero por The Lancet, prestigiosa revista médica, un niño de 10 años fue diagnosticado con coronavirus a pesar de que no presentó síntomas, hecho que cuestionó los métodos hasta el momento usados para su detección y contención.
Según lo narrado por los epidemiólogos, el menor y su familia estuvieron en Wuhan (lugar de origen del brote) en Año Nuevo, y aunque sus padres y abuelos enfermaron, el niño lucía saludable.
Sólo pudo ser diagnosticado con coronavirus ante la insistencia de sus padres de que se le realizara la prueba. Tras los análisis, dio positivo y los especialistas concluyeron que “estaba propagando el virus sin síntomas”.
Propagación de coronavirus sin presentar síntomas, una posibilidad
“Es posible que existan propagadores de enfermedades leves que estarían alimentando una especie de brote comunitario y no van al hospital porque no se sienten tan mal”, resaltó Ralph Baric, profesor de microbiología e inmunología en la Escuela Gillings de Salud Pública Global de la Universidad de Carolina del Norte.
La infección asintomática nutre la preocupación de que el patógeno, que ya se ha extendido a 17 países e infectado a más de seis mil personas, en realidad es más difícil de detectar y contener que el SARS, la enfermedad similar a la neumonía que estalló en una epidemia global y mató a 774 personas, de acuerdo con la Organización Mundial de la Salud.
Patrones similares están apareciendo fuera de China. Cuatro casos en Alemania se relacionaron con un evento de capacitación de una compañía al que asistió un colega que visitaba China y que no tuvo síntomas de enfermedad durante su estadía.
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